Estoy acá de nuevo, en dónde comenzó todo, qué lindo que es ver la vida en el mismo lugar pero con la experiencia de haber recorrido el ciclo de la vida, las cosas han sido brígidas, incluso ahora en la calma pero la experiencia da poder y fuerza. He llegado a este lugar sin las personas que me habían apoyado durante todo el trayecto, estoy en deuda con todas ellas, lo que quieran yo daría. El recorrido fue bastante intenso, amigos perdidos, diez años perdido en ella, papá fallecido, el succubus, los ataques de pánico, la traición por segunda vez y la manutención familiar.
El cenicero quedó lleno con las cenizas de todos los acontecimientos y qué queda por decir, que aprendí a la mala absolutamente todo lo que se podía aprender, la parte más difícil fueron las disculpas, los momentos incómodos, y reencontrarse con uno mismo para poder seguir adelante. Las amistades regresaron completamente y con ellas eventualmente esa droga llamada alcohol y las diversiones nocturnas, sólo que esta vez el tabaco se estrelló con la puerta cuando se cerró... Irónico.
Aunque, no todo fue traer lo bueno del pasado de regreso, las nuevas amistades florecieron y me han dado un alma más llena y un tipo de felicidad que había perdido durante mucho tiempo, me siento más joven, y creo que de alguna forma mi apariencia también es más joven. En fin, sólo un pequeñito update de dónde estoy. Un abrazo muy fuerte y los dejo con esta canción que me encanta. Por cierto, ya a casi nadie le gusta leer (huevones), así que trataré de que algunas de las siguientes entradas sean en vídeo. Hasta luego.
~Román.
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